Por José Arturo Rodríguez Obregón
Es indudable que con el gobierno de López Obrador la democracia en el país está ampliando sus perspectivas al trascender la concepción procedimental-electoral, que en esencia consiste en la celebración de elecciones libres y competitivas, a la que por muchos años estuvo limitada, y considerar los resultados sociales como otro de sus objetivos esenciales. Con un ejercicio de gobierno que a través de diferentes recursos y medios institucionales ha priorizado el combate a la pobreza y la generación de oportunidades de desarrollo para toda la población, el presidente está marcando un parteaguas en el desarrollo de la democracia en el país.
Son algunas las medidas que el gobierno ha implementado para mejorar los rendimientos sociales de la democracia, como son el incremento constante y significativo del salario mínimo, la asignación creciente de recursos a los diversos programas sociales, y la inclusión en la Constitución, ya como derechos sociales, de algunos de estos programas, como el de pensiones para adultos mayores, el de apoyos para personas con discapacidad, y el de las becas para estudiantes del sistema de educación pública.
Los resultados ya se ven reflejados en la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares 2022, elaborada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, y que constituyen la información básica con la que el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social lleva a cabo la medición de pobreza multidimensional en el país.
Entre esos resultados encontramos que los hogares que están en los primeros deciles*, y que son los que agrupan a los hogares pobres, tuvieron los principales incrementos en ingresos, siendo el decil I, que agrupa a los hogares más pobres del país, el que mayor incremento registró en el 2022, con el 19.9 %, en comparación con el año 2018.
La brecha de la desigualdad socioeconómica en el país también registró un cambio positivo, pues mientras que en el año 2018 el ingreso del decil más alto, el X, y que incluye a los hogares con los ingresos más elevados, fue 18 veces mayor que el ingreso del decil I, en el 2022 esa diferencia se redujo a 15 veces.
El hecho de que en algunas entidades los gobiernos locales también estén llevando a cabo diversas medidas para garantizar de manera permanente mejores resultados sociales, como es el caso del estado de Sonora, en el que el gobernador Alfonso Durazo impulsó la inclusión en la constitución estatal del sistema universal de becas para los estudiantes de todos los niveles de educación pública en el estado, favorecerá mucho los resultados sociales de nuestra democracia.
No cabe duda de que el gobierno debe continuar en esa dirección; es la única que nos llevará a un país con igualdad y justicia social.
* De acuedo a INEGI, “Los hogares pueden ser agrupados de acuerdo con los ingresos que perciben. Cuando se forman diez conjuntos del mismo tamaño, se les conoce como ‘deciles’, por lo que el primer decil está integrado por la décima parte de los hogares que tienen los menores ingresos, y así de manera sucesiva, hasta llegar al último decil, que está compuesto por la décima parte de los hogares con los ingresos más altos
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