Con definiciones claras, el futuro es nuestro

0 86

La historia nacional nos brinda abundantes lecciones, que bien aprovechadas permitirían tejer las coordenadas de un futuro promisorio para la patria. No se equivocaron quienes en la Independencia lucharon por la emancipación del yugo colonial; ni los liberales al promover la reforma del régimen conservador; tampoco los revolucionarios que nos legaron una Constitución de profundo raigambre social.

Hoy por hoy el país atraviesa una coyuntura crucial.
No es menor lo que está en juego: O profundizamos la transformación encabezada por el presidente López Obrador o regresan los neoliberales que saquearon el patrimonio de todos los mexicanos.

La correlación política prevaleciente no sugiere mayores riesgos de derrota en el 2024; sin embargo, no debe descartarse un escenario negativo. Todo depende de la unidad del Movimiento; si el divisionismo se incuba, se pondrá en entredicho la transformación de la vida pública nacional. Tod@s l@s simpatizantes, tod@s l@s militantes y tod@s las corcholat@s deberán privilegiar, por encima de intereses personales o de grupo, la unidad del Movimiento.

Igualmente, importante es clarificar quien reúne los atributos para abanderar la segunda etapa de la 4ª Transformación.

Necesitamos un liderazgo que reúna la preparación, el compromiso y los ideales que animaron el origen de este amplio movimiento.

Porque esta es una responsabilidad histórica ineludible, tenemos la convicción de que la compañera Claudia Sheinbaum encarna lo mejor del proyecto; su trayectoria política y profesional, su capacidad de trabajo y compromiso, nos dan certeza de que la continuidad de la transformación está garantizada y la utopía que perseguimos, de que un mejor país es posible, se haga realidad.
Es Claudia.

Deja una respuesta

Su dirección de correo electrónico no será publicada.